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Los diplomáticos son conocidos en todo el mundo como personas que valoran mucho el diálogo, e intentan resolver cualquier tipo de conflicto entre países sin necesidad de un enfrentamiento armado. Sin embargo, esto no es exactamente lo que vimos durante la conferencia celebrada en Japón el fin de semana pasado.
Bajo el título de Conferencia Internacional de Tokio sobre el Desarrollo de África, este evento pretende discutir temas que son claramente de interés para los países de ese continente. Pero una gran batalla, que incluyó una pelea, acabó robando el protagonismo al encuentro, encabezado por los representantes de Marruecos y Argelia.
Los dos países son vecinos en el norte de África y tienen una vieja disputa sobre una región llamada Sáhara Occidental, también conocida como República Saharaui. Esta porción de tierra, oficialmente, ocupa aproximadamente la mitad del territorio de Marruecos, al sur, pero mantiene un gobierno independiente, lo que requiere el apoyo de la comunidad internacional para ser reconocido como un estado soberano. Por otro lado, Argelia fomenta el movimiento independentista en el Sáhara Occidental, incluso mediante suministros militares, lo que enfurece a las autoridades marroquíes.
La confusión fue naturalmente causada por eso. El representante de Argelia colocó un cartel en una de las mesas de discusión que decía “República Árabe Saharaui”. Este movimiento enfureció al diplomático marroquí, que corrió hacia la mesa, se arrojó sobre su pecho e intentó retirar el objeto. Pero otro actor de Argelia se acercó detrás de su colega extranjero y le realizó un golpe de judo, haciéndolo caer al suelo, lo que provocó la confusión de todos.
Mira la escena rocambolesca:
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