La lucha en la liga de clubes lleva 50 años ampliando la brecha entre ricos y pobres

La disparidad comienza ahí. Para empeorar las cosas, los actores del mercado ya han indicado que ofrecerían más dinero a Libra que a la LFF, incluso aunque este último grupo tenga más equipos.

Globo, la empresa más importante en estas negociaciones en Brasil, ofreció R$ 1,7 mil millones por los derechos de transmisión de la liga brasileña entre 2025 y 2030. Libra pidió una oferta exclusiva para sus clubes y recibió la respuesta: R$ 1,1 mil millones. La diferencia fue celebrada internamente como una victoria, y los R$ 600 millones restantes fueron para el grupo rival.

En otras palabras, además de no recibir el 100% de sus derechos, seguirán teniendo que dividir un total mucho menor entre un mayor número de clubes de lo que lo harían en Libra. En un escenario como este, es posible imaginar que los equipos de la LFF obtengan aproximadamente el 50% de lo que los equipos de Libra verán en la televisión durante 50 años.

Si hoy Flamengo, Corinthians, Palmeiras y São Paulo son más ricos que los demás, la tendencia es que esta diferencia sea cada vez mayor. La creación de una liga de clubes, cuyo objetivo era reducir la desigualdad y mejorar la calidad de los productos, tendría en realidad el efecto contrario.

Hay otro punto importante que debes tener en cuenta. Una cantidad de alrededor de R$ 900 millones se dividirá ahora entre los clubes de primera categoría de La Liga: Internacional, Cruzeiro, Fluminense, Vasco, Atlético PR, Botafogo, Curitiba, Goiás, Fortaleza, América MG y Cuiabá.

¿Crees que estos clubes aceptarán el dinero para invertir en la estructura, saldar deudas y mejorar su situación financiera o salir al mercado y reclutar como si no hubiera un mañana? Te dejaré esa respuesta a ti.