El ejercicio físico regular reduce el riesgo de cáncer de próstata

Ahora, este nuevo estudio respalda la importancia del ejercicio físico en la prevención del cáncer de próstata. Llevar esto a la práctica clínica requiere un enfoque holístico y personalizado, integrando la actividad física como una herramienta esencial en la prevención, el tratamiento y la atención a largo plazo de los pacientes con cáncer.

Los resultados de este estudio refuerzan los efectos positivos del ejercicio en la salud global, además de los ya conocidos beneficios sobre el corazón y los vasos sanguíneos, lo que potencia la conciencia sobre la importancia de la actividad física en diversos ámbitos de la salud. La colaboración multidisciplinar entre profesionales sanitarios también es fundamental para crear planes de ejercicio individualizados, adaptados a las necesidades de cada paciente.

Leonardo Borges, oncólogo urólogo del Hospital Israelita Albert Einstein

El médico también agrega que es necesario integrar la discusión sobre la actividad física como parte integral de las consultas clínicas, lo que fomenta cada vez más la participación continua de los pacientes.

¿Cómo ayuda el ejercicio físico a prevenir el cáncer de próstata? Según Borges, la relación entre el ejercicio físico y la prevención del cáncer está relacionada con varias hipótesis, entre ellas el fortalecimiento del sistema de defensa de la persona, lo que haría que el cuerpo reaccionara más eficazmente contra las células cancerosas.

El ejercicio regular ha sido estudiado por sus efectos beneficiosos en varios aspectos. Una teoría que respalda el vínculo entre la actividad física y una menor incidencia de cáncer es la mejora del sistema inmunológico, que aumenta la actividad de las células defensivas, como los linfocitos y las células asesinas naturales (células que trabajan para defender el cuerpo contra enfermedades (como el cáncer). . Esto puede ayudar a detectar y eliminar las células cancerosas.