febrero 3, 2025

49°C en la India: el intenso calor imposibilitará trabajar al aire libre durante medio año |  Globalismo

49°C en la India: el intenso calor imposibilitará trabajar al aire libre durante medio año | Globalismo

El gobierno indio acaba de presentar un informe que describe las consecuencias de una ola de calor con temperaturas extremas en el país. Este verano fue el más caluroso registrado, estableciendo un número récord de días con temperaturas extremas. Las proyecciones apuntan a que el país será uno de los más afectados por el calentamiento global, pero lucha por tratar de proteger a la población más pobre de los efectos del aumento de las temperaturas.

India registró 203 días de temperaturas extremas, un récord en su historia. El número es cinco veces mayor que en 2021. Técnicamente, se declara una ola de calor cuando las temperaturas bajas superan los 45 °C durante al menos dos días consecutivos.

El gobierno indio llegó a este número sumando los diferentes días extremos experimentados por unas 20 regiones, por lo que pueden ocurrir múltiples olas de calor en el mismo día. El norte del país es claramente el más afectado, particularmente Rajasthan o Punjab en la frontera con Pakistán, con temperaturas máximas de alrededor de 25 días en cuatro meses, seis veces más que en 2021.

Esto es parte de una clara tendencia del calentamiento global. Durante los últimos 50 años, cada década ha sido más cálida y más extrema que la anterior. Entre 2010 y 2020, India registró el doble de días calurosos que en los 10 años anteriores.

La urbanización descontrolada crea ‘islas de calor’

En el caso extremo de un calentamiento global potencial de 2°C, sería imposible trabajar al aire libre durante más de la mitad del año en la mayor parte del país. Para responder a emergencias como estas, el gobierno ha elaborado un Plan de Acción Nacional de Salud, cuya implementación lleva tiempo.

En términos de adaptación, la tarea es difícil: las autoridades deben gestionar la rápida migración urbana. Esto se hace mediante la construcción rápida de torres de hormigón, que atrapan el calor y, por lo tanto, están equipadas con aire acondicionado, pero estas máquinas liberan calor a la ciudad.

Por otro lado, los inmigrantes más pobres se instalan en barrios marginales, en viviendas mal ventiladas, y son las primeras víctimas de estas olas de calor.